Joaquín Salvador Lavado Tejón “Quino”, creador de las tiras cómicas de Mafalda, falleció a los 88 años de edad.

Hoy es el día en el que Mafalda, la pequeña de 5 años, desaparece su boca, calla, enmudece, escucha, piensa, y sus ojos de asombro dicen adiós a su creador: Quino.

A través de su cuenta de Twitter, Daniel Davinsky, editor y fundador de Ediciones de La Flor, dio a conocer la noticia del fallecimiento del gran caricaturista argentino.

Joaquín Salvador Lavado Tejón nació el 17 de julio en Argentina, específicamente en la ciudad andina de Mendoza. La verdad es que los registros marcan que fue un mes después. De todas maneras, 1932 fue el año que vio nacer al famoso, y querido, caricaturista apodado Quino, para distinguirlo de su tío Joaquín.

Tras la muerte de su madre en 1945, el pequeño Joaquín se inscribió en la Escuela de Bellas Artes, que posteriormente abandonaría para enfocarse a las historietas y el humor.

A sus 20 años, viajó a la ciudad de Buenos Aires ofreciendo su historieta en distintas redacciones de revistas y diarios. Pero fue hasta 1954 que consiguió publicar su trabajo en el semanario Esto es.

En 1963 nace Mafalda con el objetivo de publicitar el lanzamiento de una marca de electrodomésticos llamada “Mansfield”. La campaña no fue realizada, pero Quino se quedó con la tira, publicándola hasta el 29 de septiembre de 1964 en la semanario Primera Plana. En ese mismo año, publicó su primer libro de humor gráfico llamado Mundo Quino con prólogo del escritor, dibujante y humorista Miguel Brascó.

Quino comenzó a publicarla en el diario El Mundo (1965), logrando un mayor éxito y así llegar a países de América del Sur y Europa. Podría decirse que la protagonista es una niña que no tiene los pensamientos que normalmente tendrían a su edad otras niñas o niños. Mejor dicho, reflexiona como una adulta de su tiempo, en una tira de humor producto de la década sesentera.

De fondo tiene hechos históricos mundiales relevantes como la Guerra Fría, el embargo a Cuba, la carrera espacial y la conquista de la luna, el muro de Berlín, el asesinato de John F. Kennedy, la guerra en Vietnam, la Guerra de los Seis Días, la Primavera de
Praga, la invasión de Checoslovaquia y el Mayo Francés.

En 1973 Quino hizo una pausa en su dibujo, y 3 años mas tarde se exilió en Italia, tras el golpe de Estado en Argentina sucedido el 24 de marzo donde la entonces presidenta, María Estela Martínez de Perón, fue detenida y trasladada a Neuquén. Los militares ocuparon las emisoras de radio y televisión dando a conocer que el país se encontraba bajo operación del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas y recomendaba a la ciudadanía acatar las órdenes militares y policiales.

La sopa es una metáfora sobre el militarismo y la imposición política.

Fue hasta 1983 que Joaquín Salvador Lavado Tejón “Quino” regresó a Argentina una vez instaurada la democracia. Al año siguiente junto a Juan Padrón, director de cine animado, crearon la serie de cortometrajes Quinoscopios, basados en los libros de Humor y producidos por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográfica (ICAIC).

Quino fue distinguido como Ciudadano Ilustre, como Maestro del Humor por su ciudad natal, y recibió la Medalla del Bicentenario en el marco de los festejos del Bicentenario en Argentina.

El 22 de marzo de 2014, con motivo de los primeros 50 años de la publicación de Mafalda, le fue entregada la Legión de Honor, máxima condecoración francesa, en el Salón del Libro de París. Galardonado también con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.

Fue nombrado Doctor Honoris Causa por diversas universidades como la Universidad de Buenos Aires, Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER), y la Universidad Nacional de Cuyo.

Quino recopiló información en su sitio web quino.com.ar donde fans de todo le mundo puedan saber más de su historia, como por ejemplo una sección de preguntas que le han hecho y que “desea sean de utilidad“:

P. ¿Qué hubiera sido, de no ser dibujante o humorista?

R. Mirá, no lo sé muy bien, tampoco me lo planteo mucho. Es lo único que sé hacer, lo único que me ha atraído en la vida. En esta profesión uno nunca deja de trabajar. Uno está sentado en un bar, en el colectivo o donde sea y tengo que estar observando a la gente. Y no soy el único, eso le pasa a todos. Es muy difícil decir cuántas horas trabajo, porque siempre estoy trabajando. Incluso cuando voy al cine estoy mirando, aunque ya haya visto la película, y presto atención a cómo está hecho el montaje, para cuando yo hago una historieta, darme cuenta de qué cuadritos sobran. Mi trabajo se parece mucho al de un director de cine, ves en qué ángulo ponés la cámara, si tomás un plano grande o chico y después ponés a los actores, que son los “monitos”. A mi desgraciadamente, todos los monitos me salen muy parecidos entre sí, me gustaría tener mayor diversidad pero no me sale.

¿Para ti cuáles han sido las mejores frases de Mafalda?