
Pabellones: arte, tecnología y arquitectura en conjunto.
Soluciones ambientales a través de pabellones: Arte, tecnología y arquitectura en conjunto.
La arquitectura a través de la historia ha respondido a distintas necesidades de la sociedad y en los últimos años no ha cesado en sus intentos de resolver un problema de gran escala y suma importancia actual: el problema del cambio climático y escasez de recursos.
En los últimos meses se han desarrollado varios pabellones abordando temáticas ambientales; entre ellos el pabellón “Air, aria, aria” de Olga Subirós, expuesto en la Bienal de Venecia, “Land. Milk. Honey” del país de Israel de igual manera expuesto en la Bienal de Venecia, entre otros.
Siguiendo esta misma línea, para la Expo 2020 de Dubái, los Países Bajos presentó un pabellón que es un sistema climático temporal, el cual propone soluciones para la escasez de agua, energía y alimentos.
Este pabellón diseñado por V8 Architects es el resultado de la fusión del arte, la arquitectura y la tecnología. Para su construcción se usaron materiales de origen local correspondientes al clima seco del desierto de Dubai, además de láminas de metal, tubos de acero, tuberías y telas textiles de biopolímeros.
Así, para lograr el microclima se erigió un cono de plantas o lo que es, una granja vertical cubierta con plantas comestibles en el exterior y setas en el interior. Además, la forma de cono actúa similar a una chimenea, la cual ayuda a regular la temperatura y la humedad de adentro. Por otro lado, el agua se extrae de la humedad generada por el aire, la cual después se usa para el riego de las plantas.
No conforme con eso, el proceso del pabellón es llevado a cabo con energía renovable obtenida a través de células solares orgánicas diseñadas por el artista Marjan van Aubel.
Al entrar al pabellón los espectadores se sumergen en un silencio y oscuridad y comienzan bajando una rampa en la que van experimentando el cambio de temperatura (calor-frescor).
Posteriormente ingresan al interior del cono donde pueden ver proyecciones sobre sombrillas blancas de las innovaciones técnicas del pabellón mismo.
Después de experimental el ciclo del clima observan la estructura cubierta de plantas y finalmente recorren una instalación olfativa que simula el olor del suelo holandés creado por Birthe Leemeijer.
Así, el pabellón deja mostrar una integración acertada de economía circular y simulación de un microclima, gracias a que después del desmontaje del pabellón, las materias primas de éste serán devueltas a sus propietarios locales y los elementos de biomasa se regresarán a la naturaleza. Estos dos últimos conceptos cada día van tomando más fuerza gracias a la solución que proponen frente a los retos ambientales actuales.
Gracias a este carácter experimental, efímero los pabellones desarrollan alternativas potenciales que quizá en un futuro pueden ser retomadas a una mayor escala para fines prácticos o incluso sirven como mero espacio para la reflexión y concientización de los problemas que estamos enfrentando mundialmente y como sociedad.
Por: Jennyfer Daian López Castillo.