El diseño sonoro en el cine
El sonido es una parte fundamental a la hora de ver una película, le agrega realismo y continuidad a las imágenes.
Como espectadores estamos acostumbrados a que nuestros sentidos se estén estimulando a cada minuto que pasa el filme, y es muy normal que toda nuestra atención se enfoque en lo visual, lo que nos muestra la pantalla, pero la parte auditiva es lo que nos ayuda a que nuestras emociones sean explotadas a su máximo y que el mensaje de la película sea más claro.
En cualquier película de terror, el ritmo del score nos va acompañando, al punto que sin ningún diálogo, podemos sentir una tensión que muchas veces el protagonista no está sintiendo en ese momento.
En una película romántica, lo más normal es ver a la chica en su cuarto escuchando canciones para que el sentimiento este mucho más marcado y que la atmósfera se sienta cursi a más no poder.
Pero no solo pasa en las películas, muchos de nosotros estamos acostumbrados a poner música mientras nos bañamos, cocinamos, estamos en el camión, etc. Y dependiendo de la música que estemos escuchando es la forma en la que nuestro cuerpo va a reaccionar a ese ritmo.
Cuando hablamos del audio, no solo nos referimos a las voces de la película, también tenemos que recordar la banda sonora, los foleys y la edición del audio. Esta última puede marcar la diferencia entre una producción profesional a una más simple.
Se considera que el cine sonoro surgió entre 1926 y 1927. Fue hasta finales del siglo XIX que se empezaron a desarrollar los primeros intentos para sincronizar imagen y sonido, como el caso de una grabación que hizo el director cinematográfico, fotógrafo William Kennedy Dickson. En esa ocasión relató audiovisualmente a un hombre tocando el violín y una pareja bailando.
A partir del auge del cine sonoro podemos identificar diversas formas de experimentación relacionadas con la creación audiovisual, como comerciales, musicales y la experimentación como consecuencia de la radiofonía.
También es cierto que artistas vanguardistas influyeron en los aprendizajes sonoros para el cine. Permitiendo perfeccionar la narrativa cinematográfica, y desarrollar una experiencia envolvente, pues si bien el sonido estereofónico surgió a finales de los años cincuenta, no es posible ignorar los avances en la microfonía, las mesas de mezcla, sintetizadores, audio multipista, y la grabación digital; además de la estética sonora y musicalización.
Veamos algunos elementos que componen la película:
La Voz
Es la calidad del timbre o intensidad del sonido producido por el ser humano, sirven para poder narrar la historia de la manera más fácil y lógica posible.
Música
Crea el ambiente, nos ayuda a predecir o sentir lo que va a suceder en la pantalla, le da profundidad psicológica a la escena y acompaña en todo momento al filme.
Foleys
Los efectos de sala, que son hechos de manera casera en un estudio y buscan recrear los sonidos que al momento de grabar la película no fueron captados a su máximo esplendor.
Silencios
La calma, es expresión profunda de sentimiento, y también forma parte importante de los efectos de audio.
El diseñador de sonido se encarga de juntar todos estos elementos y darle la magia a la película, ellos trabajan toda la banda de sonido para que quede perfecto y se adecúe de la mejor manera a la historia.
La primera película con sonido sincronizado y diálogos, fue The Jazz Singer de Al Jonlson (1927). El soundtrack estuvo a cargo de la Orquesta Filarmónica de Nueva York y aunque solo un cuarto de la película cuenta con el diálogo y la música grabada, marcó el final de las películas silentes y comenzó una revolución que abrió las puertas para el uso de películas con diseño sonoro.
De esta forma podemos notar la importancia del sonido dentro de una producción audiovisual, y la de un buen diseño sonoro para que el espectador se identifique de otra forma con el filme.
Por: Ana Lydia Cuenca.
Referencias: Aprendercine; Centrocp; Britannica
